lunes, 27 de febrero de 2012

LOS HERMANOS GRENET

                                 Senén Suárez Hernández


Nos encontrábamos actuando en el cine teatro “Radio Cine” situado en Neptuno y Galiano, el trío de ”Luisito Pla y sus guaracheros”. Más un gran elenco de artistas, el trío se componía de Luisito, voz,  guitarra y tumbadora, Gerardo Navarro, voz prima, maraca y bongoes y el  que suscribe, guitarra prima, voz tercera y cencerro.

Como se puede comprobar el trío en la música viva cambiaba de instrumentos. Esa noche se encontraba mirando el espectáculo Ernesto Grenet, baterista, compositor y director de agrupaciones, el cual mantenía un conjunto  bailable y  algo espectacular en el  cabaret  Tropicana.

Cuando terminamos de actuar, Grenet nos interceptó  en nuestro camerino para pedirnos que nos agregáramos a su grupo. Luisito  no quiso aceptar, pues  además del  trío, él poseía  una barbería, y Navarro tenías sus entradas monetarias por otras vías, y en  el caso mío, estaba en la calle y sin llavín, quiero decir que acepté en el acto.

En Enero de 1948 comencé  a trabajar en Tropicana, junto a un personal muy bien calificado, pero yo no estaba sindicalizado,  entonces para poder seguir laborando tuve que pertenecer   al sindicato llamado” Unión Sindical de músicos de Cuba” el 10 de Junio de ese año.

Me sentí muy contento en este lugar, claro después de recibir tantos trastazos  en los siete años anteriores - era lo lógico.

Ernesto Grenet Sánchez ( La Habana 1908- Miami 1981), me resultó una persona muy tratable, porque  la disciplina en el grupo era indispensable, era comunicativo pero su vida familiar y laboral nunca las compartió con nadie. Por ejemplo: Yo sabía  que su hermano Emilio había tenido un accidente horrible en el  Malecón habanero y que Eliseo, era uno de los compositores más admirado por todo el pueblo, pero  de eso él no hablaba. También sabía que nuestro director actuó junto a su hermano Eliseo con la orquesta de Julio Cueva en el cabaret La Cueva en París, y de allí se incorporaron juntos  a los guerrilleros en España. .

Estando en la agrupación grabamos para la disquera Panart,  muchas  obras donde mencionaremos algunas: ”Ni me quieres ni te quiero“ de Ernesto Grenet,  y “De Guanabo a Tarará” de Ernesto y mía,  no grabó más obras creadas por él.

Nosotros conocíamos que  tenía muchas más obras compuestas, sobre todo “Drume Negrita” la cual resultó un  hermoso canto de cuna   interpretado  por una increíble cantidad de solistas  y orquestas a nivel mundial, pero en la mayoría de los casos  su nombre no aparecía , es decir  a Ernesto eso no  lo sacaba de su mutismo.

Cuando regresamos de una gira por Venezuela,  me llamó y me dijo: Quédate con el grupo, me voy a dedicar a la tintorería de mi  suegro,  así de simple.

Una noche del 4 de Noviembre  de 1950, unos días antes de partir para los carnavales de Maracaibo, el maestro Grenet nos pidió que lo acompañáramos al velorio de su hermano Eliseo, el cual se encontraba cerca de Concha y Luyanó, asistimos todos sin reparo de permanecer toda la madrugada,  pues  bien  lo merecía  un director que apreciábamos.     .

“Emilio Grenet Sánchez, (Neno), (La Habana 1901-1941, Pianista, Compositor e instrumentista. Era el que más conocía de música teórica.  Editó en  1939  un libro titulado “Música Popular Cubana”, Compuso además una pieza coral  con el titulo de “Maracas y Bongó”, pero su musa melódica  resultaba atractiva y pegajosa, es así que de su creación tenemos por  conocidas,  “Sabia ausencia,” “La torrecilla” y sones como “Curujey”, “Vito Manué”, “Yambambó”, “Quirino con su tres”, en estos últimos utilizó  textos poéticos de Nicolás Guillén. En 1930, viajó a España y Francia”,  Ya estando en Cuba, cuando se bañaba en el litoral de la bahía de la capital, costumbre habitual en él,  un tiburón  lo atacó y le cercenó parte del brazo y la pierna izquierda, este desagradable accidente fue muy sentido por toda la población habanera, aunque vivió varios años más..

A los 33 años de edad fallece de forma inaudita uno de los más prometedores músicos cubanos,  

Eliseo Grenet Sánchez ( La Habana1893-1950),  Pianista, Compositor y Director de orquesta La Habana 12 de Junio de 1893 - 4 de Noviembre  de 1950. Uno de los más grandes valores  de nuestra música popular, fue creador, ejecutor y propulsor de este género musical. Aunque lógicamente esto no salió de la nada. Desde los 12 años y producto de la miseria que padecíamos en los primeros años de la mediatizada república, él tocaba el piano en el cine de películas  silentes  La  Caridad por un peso cada noche.

Así se fue elevando su talento congénito hasta llegar a ser admirado por nuestro pueblo, que conocía de todas sus luchas.

El magnifico músico cubano compuso infinidad de obras más bien interpretadas por orquestas  charangas y septetos y en ese sentido mencionaremos a: “La Mora”,  “Mamá Inés”, “Las perlas de tu boca”, “Lamento esclavo”, “Si muero en la carretera”, “Lamento cubano”, “Tabaco verde” y otras.

El 28 de Mayo de 1928, en New York  el Sexteto Habanero le grabó a Eliseo su famosa obra “Mama Inés”,  también el Habanero le grabó en la ciudad de   La  Habana el 14 de Febrero su conocido son  “Espabílate,” el primero cantado por Abelardo Barroso y el segundo cantado por Miguelito García.  

También  creó varias zarzuelas tales como “La Loma de Veracruz”, presentada por la compañía de Regino  López, con libreto de Aurelio Riancho y creó la zarzuela La “Virgen  Morena”, con mucho éxito en España.

Grenet  dirigió varios conjuntos musicales como el del  teatro  ”Politeana Habanero” y el del teatro cubano de Arquímedes Pous. De aquella época son los pregones El tamalero, El aguacatero, y su inmortal  Papa Montero. Con la zarzuela Niña Rita con música de Eliseo  Grenet y Ernesto Lecuona debuta Rita Montaner en el teatro Regina en 1927, con muchos éxitos.

Luego de un viaje por América del Sur, regresa a Cuba en 1931, el maestro encontró la triste situación en que vivía nuestro país bajo la tiranía  machadista, y  en 1932  es cuando él  se inspira y crea “Lamento Cubano” lo cual provoca su expulsión de la patria.


El comienzo de este lamento dice así:
               
            Oh, Cuba hermosa primorosa porque
            sufres hoy  tantos quebrantos
            oh, patria mía quién diría que tu
            cielo azul nublara el llanto

Con el texto y la  melodía de esta sentida obra, que  corrió como el viento por todo el país,  el maestro se vió necesitado de abandonar apresuradamente su patria para salvar su vida,  la cual se encontraba en peligro, es así que llega a Los Estados Unidos de Norteamérica. Ya en 1934 se incorpora junto a su hermano Ernesto en la orquesta del maestro Julio Cueva  en el cabaret La Cueva, de Paris, Francia.

Cuando estalla la guerra civil española, Julio y Ernesto se incorporan a los rebeldes republicanos, y Eliseo se marcha a New York, ciudad donde le presentan  a un desconocido cantante llamado Jorge Negrete, quienes se ponen de acuerdo y viajan a Cuba, para alcanzar un triunfo inusitado en la emisora más importante del país La CMQ de Monte y Prado.

Después de un tiempo Eliseo se queda en nuestra patria  trabajando en distintos lugares y como compositor creó ”Facundo”, y el “Sucu Sucu”,  música oriunda  de  Isla de  la Juventud, “Felipe Blanco”, en espera de una prohibición que existía sobre la obra,  es en esos momentos en que se produce su deceso.

Nuestra capital cuenta  con tres monumentos  de compositores célebres,   el de Eliseo Grenet, en la Ave.41 frente a Tropicana y el de John Lennon en el parque de 17 y 6, Vedado y el de Agustín Lara en la Ave. del  Puerto de la Habana.        
   

BIBLIOGRAFÍA
Orovio  Helio, Diccionario de la música cubana
Editorial Letras Cubanas 1981

Hernández Ojeda Norka, Eliseo Grenet, “Mamá Inés tiene 60 años”
Prensa Plana, La Habana  Viernes 24 de Julio de 1987.

Nota-Eliseo Grenet Sánchez fue inhumado el 5 de Noviembre se 1950,
Libro 189-pagina 636- No. Inscripción 636-.La  Habana

lunes, 20 de febrero de 2012

MIS RECUERDOS BAJO LAS ESTRELLAS II Parte



 Senén Suárez Hernández


Después de realizar una reunión urgente, se omitió de los créditos del vestíbulo del cabaret el nombre de Gran Casino y se le adjudicó el de Los Chavales de España, teniendo esta colosal agrupación tres nombres Orquesta Luís Rovira, su creador, Gran Casino, y Los Chavales de España.

Después de su fracasado debut, los jóvenes españoles comenzaron un desenfrenado ensayo que prácticamente no dormían, adquiriendo su verdadero modo de actuar reflejado en sus presentaciones diarias en aquel rústico sitio colmado de árboles por todas partes. 

Su repertorio era excelente y variado para un público que cada vez aumentaba como la espuma, es por ello que conocimos melodías tan agradables  y bien concebidas como:

Que bonita es Barcelona / M. Moreno
Lisboa antigua  / R. Portela
Isla Canarias / J. María Tarridas
El relicario / J. Padilla
Cariño bésame / Rossi
Naciste para mí / Manolo Palos
Monasterio de Santa Clara /  B. Goldier
Las hojas muertas / Prevert Kusma
La vida en rosa / E. Piaff
Abril en Portugal / Ferrao
Te sigo esperando /  Manolo Palos
Los sitios de Zaragoza
Cuba de mi amor  / Manolo Palos
Recuérdame / I. Vasllescu
Danza de los patitos / S. Arevallo
Francisco Alegre / QLQ

La lista de su repertorio aumentó y aquella orquesta va llenando los espectáculos donde se presentan con un éxito rotundo, es justo destacar que tenían mucho antecedente de la memorable orquesta Lecuona Cuban Boys en la forma de sus presentaciones, 

Los jóvenes españoles trabajan dos show, para extasiar las noches del inmenso público que lo aplaudía intensamente, no obstante una noche le pidieron al maestro Grenet que no realizara el tiempo final del espectáculo porque ellos lo realizarían voluntariamente y esto hizo que la orquesta después del segundo show actuara hasta altas  horas de las  madrugadas.



Los Chavales de España acapararon la atención del famoso público que visitaba el cabaret, pero también su remuneración creció como una bola de nieve. Por un período de cortos  años se mantuvo la agrupación creada en Barcelona  con las magnificas voces  de Luís Tamayo (barítono) y Pepe Lara (tenor).

El conjunto de Ernesto Grenet finalizó su contrato en noviembre del 1949 y en enero del 1950. Es por ello que ese año marchamos con un contrato  para Maracaibo para cumplimentar  la  actividad de los carnavales  por un mes y días, dejando atrás un Tropicana con cabaret lleno de público y un formidable litigio entre Martín Fox y sus socios, con el dueño del citado centro nocturno Víctor de Correa D´Costa.

Terminada nuestra actividad en los festejos  de Maracaibo, marchamos en ferry  hacia el poblado de Cabimas atravesando el lago Maracaibo, para amenizar  un baile en el mencionado sitio  petrolero, el cual resultó una bonita experiencia.

De regreso a nuestra patria, el maestro Grenet  me  comunicó que se retiraba de la música y me plantea que yo me quedara dirigiendo la agrupación, pedido al cual yo accedí pues  no tenía otra opción.

Después de realizar algunos ajustes, el 14 de diciembre del mismo año 1950, debutamos en el cabaret Río Club, en las márgenes del río Almendares.

Parte de la dirección del cabaret Tropicana asistió a la apertura de este  nuevo cabaret, y como nosotros seguíamos trabajando del mismo modo y con la misma disciplina que mantuvimos con el maestro Grenet,  llamamos la atención grandemente al dirigente Alberto Ardura, quién me mandó un mensaje para que me incorporara a los bailes del ya famoso Cabaret Tropicana y consultando con mis compañeros, aceptamos la  oferta pues sabíamos que donde estábamos no íbamos a tener éxito.

En febrero del 1951 comenzamos a trabajar en el cabaret Tropicana en su plena efervescencia, el cual estaba dividido en dos uno llamado “Bajo las estrellas” y el otro “Arcos de cristal “,  ambos realizaban el  espectáculo de acuerdo con el estado del tiempo  y   el cabaret no paraba su actividad sin parar ni una sola noche.

Las construcciones marchaban vertiginosamente, dándose el caso curioso que el accionista mayor Martín Fox no permitió que le cercenaran ningún árbol, es así que quedaron dos palmas como dos reinas en el cabaret Bajo las Estrellas y la otra en el centro de la cocina. Alberto Ardura el accionista menor que quedó como responsable  cultural del centro, con tal responsabilidad   contrató al bailarín devenido en coreógrafo Roderico Neira (Rodny) el cual dio rienda suelta a su imaginación  creando maravillosas producciones artísticas

Otras de las magníficas ideas del artífice creador del cabaret mas lujoso y original del mundo Tropicana.  Max Borges (hijo), fue crear una pista circular cubierta de tabloncillos compactos que se levantaba casi un metro de forma automática para situarse a ras con la tarima de los músicos y darle paso al cuerpo de baile y demás miembros del show. Una vez concluido el espectáculo  este  volvía a su estado original para dar paso a los bailables de los visitantes del cabaret., esto fue muy novedoso.

Las ideas de Rodney  florecían como por encanto, sería imposible enumerarlas pero aún recuerdo algunas que no se me han borrado de mi mente como: “Recuerdo del Brasil” donde contrató a la famosa intérprete brasileña Carmen Miranda en sus mejores momentos artísticos, su obra máxima, para mi criterio, Omelenkó, donde reunió a casi todos los valores del género afrocubano de nuestro país como : Celia Cruz, Merceditas Valdés Paulina Álvarez, Trinidad y sus tambores batá con la voz inconfundible de Eugenio de la Rosa, un enorme cuerpo de baile donde aparecía la dinámica Celeste Mendoza, bailarines como Miguelito Cheki,  Henrry Boyer, las  parejas  de bailarines Chiquita y Johnson, Sicardi y Brenda,  Tomas Morales y bellas  modelos para recrear la vista de las multitudes que hicieron un derroche de alegría algo más  de un año en cada producción..

Pero podemos decir que la atracción más espectacular de Tropicana lo fue sin dudas la del intérprete  Nat King Cole, donde el ya famoso cabaret en ese período  cobró la entrada, caso único en nuestra ciudad para un sitio de esa índole.

El genial vocalista americano venía precedido de una popularidad colosal,  de hecho traía más de diez colaboradores y dos baúles colmado de sus indumentarias de trabajo, viajaba con su esposa y una hija. Su tiempo de actuación no tenían  límite.
Así recuerdo aquel cantante quién se acercó a los músicos con una maravillosa y muy generosa  actitud.

Otras de las actuaciones del célebre intérprete afro americano en nuestro país fue la de grabar acompañado por el  maestro Armando Romeu  González y su  banda de músicos cubanos en la disquera  Panart las obras: “El bodeguero” de Richard Egüe, “Acércate más”  de Osvaldo Farrés, y “Tu mi delirio” de Cesar Portillo de la Luz, esta última  a solo de piano y las otras  con letra en Español, por tanto  “Tu mi delirio”   no pudo articular la letra, curiosamente no  hablaba el idioma. Español.      

Otros intérpretes  norteamericanos  de grata recordación  lo fueron  el de Johnny Puleo, and his Harmónica Gung, integrado por cinco miembros ejecutando solamente filarmónica. Llegaron a nuestro país después de actuar en la película “Siempre en mi corazón”,  realizada en Hollywood, original del maestro Ernesto Lecuona.Casado y Betty Reilly, estrella de Hollywood y Broadway.

De la ciudad de México actuaron el Trío Los Tres Ases, el ciego Gil Olvera y su órgano  que daba la impresión que emitía palabras, Los Tex Mex, El músico poeta mexicano Agustín Lara y la intérprete Evangelina Elizondo, La diosa pantera Tongolele, cuarteto Los Rufino, integrado por el  barítono mexicano Carlos Rufino y su compañera la cubana Mercedes Villaverde Azcacarreta (Bebita) y sus hijos Carlito y Julita  Rufino (Yuly).

Una producción de Rodney muy gustada lo fue CARABALI, con los siguientes artistas:
Cuarteto Los Rufino, Leonela González, Raúl Díaz, y el Cuarteto Las D´Áida .

Otros elencos artísticos de valía  de punta y que recordamos fueron:
Rosita Fornés cantante de música internacional, La Vedette de Cuba
La pareja de rumberos Ana Gloria y Rolando
Rolando Espinosa, una personalidad de la Rumba
Zoraida Marrero,  cantante lírica
Xiomara Alfaro, interprete lírica
Libertad Lamarque, quién descargó un son con el conjunto de S. Suárez
América Crespo, cantante lírica
Miguel Ángel  Ortiz, tenor lírico
Miguelito Valdés intérprete de música cubana.
Lucy Fabery, intérprete de canciones
Los Gracia, creado por jóvenes cubanos para interpretar música española
Los Xey, intérpretes de música española
Eva Flores, cancionera 
Los cómicos argentinos  Dik y Biondy (Pepe)
Cuarteto Faxas, dirigido por el pianista Carlos Faxas Valerino
Orquesta Solera de España, interpretes  del cancionero internacional
Orquesta  Xavier Cugat intérpretes de música internacional 
Orquesta Riverside, con su cantante estrella Tito Gómez
Entre otros.

El año 1957 fue un año con poca afluencia de visitantes para el cabaret más lujoso del Mundo, por tal motivo la dirección del mismo contrató a la Banda Gigante del Bárbaro del ritmo Benny Moré para un tercer show que se realizaba  a las dos de la madrugada aproximadamente, tal hecho llenó las expectativa someramente pues la vida nocturna habanera se presentaba tumultuosa.

Nuestra agrupación finalizaba su contrato en este lujoso y mundialmente conocido cabaret a finales del mes de noviembre de ese año 1957, lo cual la recibimos con nostalgia por una parte y por otra tranquilidad porque todas las noches al terminar en el cabaret éramos vulnerables a los registros de la policía donde todo lo que se movía de madrugaba era interceptado. 
Así terminamos en  TROPICANA UN PARAIZO BAJO LAS ESTRELLAS

Bibliografía

Díaz Ayala Cristóbal Fundación Musicalia
Lam Rafael,  Tropicana. Un paraíso bajo las estrellas
Editorial Letras Cubanas, 1997

Agradecimiento 
Manuel Villar Fernández Musicógrafo
Lic. Belinda de la Caridad Suárez Pesi
Lic. Roberto Payeras García.

martes, 14 de febrero de 2012

MIS RECUERDOS BAJO LAS ESTRELLAS I Parte


Senén Suárez Hernández


Finalizando el año 1947, retorné por un corto período con el Trío de Luisito Plat y sus Guaracheros,  es así que la última actuación que realizamos fue en el cine teatro Radio Cine, sitio donde todo los artistas actuábamos con los nervios de punta porque a pesar de que se colmaba de público, gran parte de ellos iban  a molestar a casi todos los que actuaban en el espectáculo.

Nosotros tuvimos la suerte de salir airosos de la terrible prueba. Coincidentemente en el público se encontraba el maestro Ernesto Grenet Sánchez, quién nos abordó en el camerino para invitarnos a  incluirnos en su grupo del cabaret Tropicana.

Ni Luisito Pla  ni Gerardo Navarro aceptaron  pero yo si tuve esa necesidad  ya que las actuaciones del trío eran escasas.

Una tarde del mes de diciembre de 1947, comencé a caminar por la Avenida  Truffin, la cual terminaba exactamente en la entrada del mencionado lugar, para encontrarme con los músicos de la orquesta la cual iba a integrar. Yo que vivía en el centro de ciudad de La Habana cuando llegué a la admirada  arboleda   me asombré muchísimo de ver aquel monte de árboles en medio de la ciudad de Marianao municipio habanero, fue algo emocionante que me hiciera  recordar a  “mi montaña querida” donde pasé parte de mi niñez

Debo mencionar que según me iba adentrando al inmenso  bosque .propiedad de Mina Pérez Chaumont, heredada de su esposo el ciudadano extranjero Regino Du Rapaire Truffín,  más nervioso me sentía, y no precisamente por la música, de esa me sentía seguro, si no de trabajar en un cabaret noche tras noche a lo cual no estaba habituado.

Al llegar al centro del cabaret  después de pasar  un pasillo que resultaba  el lobby del mencionado sitio nocturno, me encontré el maestro Grenet que  me esperaba junto a su grupo del cual conocía solamente a Orlando Vallejo, los demás resultaron ser:  El pianista Rubén González, bongosero Panchito Bejerano, trompetas Evelio (El manquito) y Alfonso Fleitas, contrabajo Tomás Barrenechea, cantante  Estanislao Sureda (Laito) y percusión menor y director  Ernesto Grenet,.en total éramos nueve músicos porque la tumbadora la ejecutaba lo mismo Ernesto que algunos de los vocalistas.

En la década del 30, llega a nuestro país el ítalo portugués conocido por nosotros  como brasileño. Víctor Correa D´Costa procedente de Panamá con un vasto conocimiento de actividades de fiestas y danzas nocturnas.

Tan pronto arribó a La Habana,  Correa D´Costa creó el cabaret Eden Concert, situado en la calle Zulueta no 228 entre Ánimas y Virtudes Habana Vieja, para ello contrató a los coreógrafos Julio Richards, Henry Bell y Sergio Orta sucesivamente.

A pesar del esfuerzo y la astucia puesta por Víctor de Correa en crear un cabaret con muchos detalles significativos sobre el Eden Concert, no se percató de la proximidad  de su similar “Zombie Club”, un exquisito centro nocturno con dos agrupaciones de excelencia tanto musical como de espectáculo en si,  pues en los bailables el Zombie contaba con el conjunto Kubavana dirigido por la estrella del son Alberto Ruiz y el jazz banb acompañante del show dirigido por el maestro Adolfo Guzmán. 

Otra innovación original resultaba la tarima giratoria que se producía en los cambios de agrupaciones. También un detalle significativo y que le daba mucha fama a este cabaret era el resultado de ser radiado por la emisora COCO en los momentos bailables.

Pero Correa D´Castro no se amilanó, el sabía que la competencia en  La Habana Vieja iba a ser fuerte con el auge que tomó el Zombie Club en aquellos tiempos. Entonces  decide buscar un lugar todo lo acogedor  posible para lograr sus sueños, y como dice el refrán el que busca encuentra, es así que se dirige al hermoso monte de árboles verdes, propiedad de la viuda Mina Pérez Chaumont y le arrienda un pedazo considerable de terreno.

El impetuoso brasileño se lleva consigo todo los implementos del Eden Concert  incluyendo al maestro Alfredo Brito y su  orquesta, más la empleomanía completa  para su nuevo sitio marianence. 

Es así que el nombre que utiliza para el nuevo cabaret,  mientras algunos entendidos sostenían que el primer nombre fue “Beau site” (Bello Sitio), la hija de Alfredo Brito llamada Elsa Valdés Brito Quintana  sostenía lo siguiente – Yo aseguro que el cabaret Tropicana de Marianao se inició en 1939 con ese nombre y no otro,  porque antes del 39 ya existía el nombre y la canción de mi padre. (…) R. Lam.

Pronto me adapté al modo de hacer música del Conjunto de Grenet, el cual poseía un repertorio muy actualizado y sus músicos eran extremadamente experimentados en sus respectivos instrumentos. A Ernesto Grenet Sánchez lo considerábamos como un director ideal, era exigente, muy considerado, aspecto bien  difícil en nuestro mundo musical. Su carácter era muy introvertido, nunca nos hablo de sus actuaciones en el cabaret parisino La Cueva, situado en el centro de Paris como baterista  junto al gran trompetista Julio Cueva, tampoco nos hablo de su participación  como combatiente en la guerra civil española.

Víctor de Correa no tuvo necesidad de desembolsar grandes cantidades de dinero para crear Tropicana, se valió de la bella  flora del lugar, construyendo una pista circular  cementada y ordenó realizar una tarima para la música de medio metro da altura con un  techo volado de madera entre dos palmas lo cual resultaba un cabaret mas bien rustico

Se comentaba que el brasileño portugués  manejaba el cabaret correctamente sin ayudantes, algo inexplicable para una persona obesa y entrada en mucha edad y sin familiar allegado.

Él utilizaba casi permanente a la famosa intérprete Rita Montaner, al pianista  Felo Bergaza y a Bola de Nieve. Tenía un pequeño cuerpo de baile, la pareja de rumberos   Estela y Rolando, Vilma Valle la presentadora Velia Martínez y al  coreógrafo Henry Bell   entre otros. Para su protección solo tenía dos perros enormemente grandes.

La orquesta que acompañaba a todo este espectáculo en el año de mi  entrada en el mencionado centro nocturno, la dirigía Armando Romeu González, con un personal estelar, solamente una cuerda de cinco saxofones, piano contrabajo, drums, y un tumbador que en aquellos tiempo era Candido Camero (Candito). 


El maestro no podía incluir trompetas porque le molestaban a la dueña, pero más tarde  amplió la orquesta con otros  músicos quedando de la siguiente forma:

Director Armando Romeu González 
Ramón (Bebo) Valdés -  pianista
Kiki Hernández - contrabajista
Guillermo Barreto - baterista
Luís Escalante -  trompetista
Nilo Argudín - trompetista
El Guajiro - trompetista (Que no era Mirabal)
Rubén Romeu - saxofonista
El cabito-  saxofonista 
Pedro Chao - saxofonista 
Tata Palau - saxofonista
Gustavo Mas -  saxofonista.
Papin Abreu - tumbadora
Trombón - un español que no recuerdo el nombre

Siempre  existieron altas y bajas
   
El éxito de Tropicana para Víctor de Correa, no resultó lo esperado, por estar  lejos de la ciudad y con muy escasa publicidad. Posteriormente vinieron días de paupérrima utilidades, pero el experimentado director no se intimidó y decidió tomar dos opciones: una  mandar a su esposa Teresita de España para que contratara un grupo  artístico en la tierra española  que le llenara el cabaret y la otra consistía en  arrendar el lobby de la entrada del cabaret a tres jugadores profesionales como Martín Fox, Oscar Echemendía y Alberto Ardura. Al final se llevaron  a cabo la dos  opciones.

Una tarde del mes de octubre de 1948, nuestro director Ernesto Grenet nos insta a varios de nosotros para  recibir en el muelle Sierra Maestra a unos músicos españoles que venían para actuar en el cabaret Tropicana.

Teresita de España, esposa de Víctor de Correa, había contratado  a  una orquesta que actuaba en el centro nocturno Pasapoga de Madrid y que reunía todo los elementos que le había señalado su esposo.

Nuestro encuentro con los músicos españoles en el muelle habanero resultó muy calido y amistoso, aunque  los encontramos muy estresados y nerviosos debido a lo que representa  una  travesía en barco desde España a nuestra ciudad sin estar habituado.



De forma inusitada el  experimentado y diestro Víctor de Correa  lanza el debut de la orquesta un día después de su llegada.  Aquellos músicos egresados  en su mayoría del Liceo de Barcelona con el nombre de Orquesta  Gran Casino, se ven atropellados y casi descompensado de su verdadera forma de actuación, resultando su primera actividad  verdadero desastre. 

Manolo Palos  su director que se había mantenido desde sus inicio en 1940, no concebía tal desatino pero así es la música hija del ensayo como premisa.

Continuará……..

domingo, 12 de febrero de 2012

JAKARTA, UN LARGO VIAJE, UNA EXPERIENCIA ÚNICA



Senén Suárez Hernández



Siempre recuerdo  mi viaje a Jakarta  capital de  Indonesia. Pienso que me admiro como  pude conciliar mis temores a los viajes vía aérea,  tan largo  en  la compañía del  amigo Carlos Faxas y un grupo de muchachos del INDER que viajaban con nosotros. Ellos me conminaron que me uniera a la posiblemente primera  embajada  artística y deportiva del gobierno Revolucionario con cinco años en su asenso a la dirección del país, estos recuerdos me llegan a la memoria
en algunos momentos,  por lo que decidí escribir sobre este viaje.

Carlos Faxas Valerino, compositor, orquestador y director de agrupaciones, se encontraba frente a la brigada que representaba la parte artística complementada por el famoso cuarteto Los Modernista, quienes ya habían recorrido los trámites para el extenso  viaje, el cual implicaba trámites de vacunas y pasaportes completado con los imprescindibles ensayos.

Cuando fui incluido en el viaje, tenía solo una semana para realizar todos aquellos detalles imprescindibles, me sentía desorientado y fuera de grupo pero acepté el reto  sabiendo que era arto difícil.

Ya con todos los datos ultimados, nos dispusimos a tomar la nave que resultaba un modelo Britania de cuatro motores con hélices, el cual nos situó en Praga capital de Checoslovaquia  en trece horas con una escala de una hora  en Gander,  Canadá.

Allí estuvimos cuatro días por descoordinación en los cambios de aviones,  es por eso que volamos una hora aproximadamente a Paris capital de Francia para tres días después abordar un Boeing 707, llamados en aquella época ataúd volante por fallas en su fuselaje.

En infinitas horas de vuelo aterrizamos en Roma capital de Italia, y con períodos de horas llegamos a Bangkok capital de Tailandia, donde dejamos aquel monstruo para tomar un avioncito que nos llevó a Jakarta capital de Indonesia, fin de nuestro desesperado  periplo.

En aquella capital fuimos esperado por una recepción increíblemente bella, llena de música y flores donde  nuestros nervios se aplacaron con creses. 

El primer  Juego de la Ganefo, que así lo llamaban estaba anunciado del 10 al 22 de noviembre del 1963, por lo cual desfilamos los 41 delegados en el estadio de Jakarta.

La foto que aparece en este trabajo es recién terminado el desfile del grupo musical bajo la dirección de Carlos Faxas,  que  representaba parte de la delegación en el recinto deportivo  de Jakarta. 

En la pequeña delegación teníamos el orgullo de contar con tres personalidades de nuestra vida cubana, los cuales respondían a los nombres del famoso pelotero Gilberto Torres, el veterano comentarista deportivo Elio Menéndez y el revolucionario de siempre Carlos Faxas Valerino.



EL REGRESO 

Con la gestión del cónsul cubano en Indonesia, que siempre estuvo atento a todas las actividades que tuvo la embajada artística deportiva nuestra  en el  lejano país,  partimos casi llegando en el mes de diciembre.

Partimos de Jakarta en un avión ruso no muy grande de propulsión, el cual después de un largo viaje aterrizó en el Cairo Egipto. Allí permanecimos varias horas por una tormenta que interfirió el viaje.

Al fin llegamos a Praga, la bella y vetusta ciudad, donde después de dos días partimos en la vieja nave Britania para hacer una escala técnica  en Shanno Irlanda del Norte.

En el aeropuerto de esta ciudad estuvimos una hora aproximadamente, mientras  serviciaban el transporte aéreo que nos traía de regreso. Con la orden dada por los altoparlantes del aeropuerto, todo el personal se situó en el avión, partiendo a las 12 de la noche. 

Con veinte minutos de vuelo sentimos la voz de una aeromoza que nos comunicaba: Atención señores pasajeros: Estamos regresando al aeropuerto de Shanno por un desperfecto en los motores,  manténgase en sus puestos  con el cinturón  puesto.

El silencio no se hizo esperar y en el acto cundió el pánico en silencio, nuestro compañero el Saxofonista Verdecia, que viajaba en los últimos asientos vio aquel chorro de combustible desplazándose por un tuvo como de cinco o más  pulgada y  nos comentó que perdió la voz, le faltaba el aire y su corazón latía desaforadamente. Nos contaba el colega que esos quinces minutos fueron años para él. Nosotros estábamos asustados pero no tanto. El avión comenzó a dar vueltas sobre el aeropuerto hasta vaciar sus tanques repletos de combustibles para aterrizar.

Al fin la nave aterrizó para darle fin a nuestra angustia. Tres días con tres noches estuvimos en los pequeños apartamentos del aeropuerto de  Shanno,  Irlanda del Norte, con la temperatura bajo cero, esperando que el técnico de estos aviones Britania viniera de Londres para arreglarlo.

El lunes temprano en la mañana llegó el señor y luego de estar con aquella máquina voladora una hora mas menos, le dio unas vueltas al aeropuerto y  se lo entregó a los pilotos lista  para volar.

La tripulación dio la orden  a  los pasajeros de  estar preparados para partir a las 9 PM de aquel día, que ninguno de nosotros hemos olvidado.

Pasada las ocho horas llegamos a Gander, para después de cuatro aterrizar  en Rancho Boyero, algunos con lágrimas en los ojos, pero con la satisfacción de haber cumplido.

Ya en Cuba me integré al Salón Rojo del Hotel Capri, donde me esperaban mis compañeros del Combo para realizar mi vida normal.

AGRADECIMIENTOS

Lic. Belinda de la Caridad Suárez Pesi 
Lic. Roberto Payeras García.